Por alguna razón, en el desarrollo de las relaciones interpersonales entre mujeres, se desarrolla más fácil la envidia que la amistad. Quisiera que no fuese así, pero es evidente que en algunos casos, las mujeres nos vemos motivadas por envidias o egoísmos para actuar con otras mujeres.
Hay algo con lo que suelo tener bastante cautela y es en qué cosas le cuento a mi grupo social de amigas, porque en ocasiones demasiada información puede llegar a terminar con algunas amistades.
Indiscutible mente cuando te reúnes con tu grupo de amigas, en algún punto de va llegar al tema de las relaciones amorosas y preguntas como ¿te gusta alguien? ¿Que está pasando con fulano? ¿Por qué tal persona hace eso? ¿Por qué tú lo otro? Y está bien, porque mayormente es lo que hacemos cuando nos reunimos, hablar de muchos temas.
Hace poco en medio de una de esas charlas, se me cuestionaba sobre una persona que ellas decían ver muy cerca, así que sin preámbulos, preguntaron ¿está pasando alguien con este chico? A lo que les contesté que solamente éramos buenos amigos. Hasta allí pudo haber llegado todo y seguir con otro tema. Pero 1 o 2 personas insistían en asegurarse que no estaba pasando nada en sentido romántico, en realidad.
Debo confesar que en un momento me sentí acorralada por la actitud de ellas, de querer que yo dijera que si estaba pasando algo, y cualquier cosa que expresaba lo hacían ver al acomodo de su punto de vista. A lo último, la verdad me estaba molestando un poco, así que les dije que dejaba que sus mentes maquinaran lo que quisieran, al fin y al cabo ya les había dicho la verdad.
En este momento, pienso un poco en la situación y me digo a mi misma que debi haberles hecho saber que me estaba sintiendo incómoda, que si eran mis amigas, deberían creer lo que les estaba diciendo, que si tienen afán en que consiga a alguien, no se preocupen, que yo no estoy afanada por eso. Y que si continuaban con esa actitud preferiría no reunirme más. Podrás pensar ¡que exagerada! Pero piensa por un momento en aquellos paparazzis o personas de la prensa que atacan sin piedad a alguien, solo por acomodar la información a su antojo, sin importar quien salga herido en el proceso. Pues algo así sentí. Solo quería huir.
Cabe adicionar que en muchos aspectos soy bastante reservada y así como a algunas se les hace más fácil hablar sobre sus sentimientos, yo prefiero guardarlo para mi misma. Sobre todo por eso de: “Antes de confesarle un secreto a alguien, no olvides que tu amigo tiene un amigo, y ese amigo tiene otro amigo” No me interesa satisfacer su deseo de información o chisme.
También pensé que las cosas podrían tornarse incómodas por ejemplo, si alguna de ellas le mencionara a mi amigo o insinuara algo del asunto. Y no quisiera que una amistad se dañe por algo tan bobo.
Quizás si vuelve a tener la misma actitud, les diga algo de lo que pienso o quizás simplemente me aleje.
Es muy difícil encontrar buenos amigos.